La flautista ElenaDurán...Paraje tunero
mayo 18, 2009
mayo 08, 2009
Flautista sin fronteras |
SONIA SIERRA EL UNIVERSAL VIERNES 08 DE MAYO DE 2009 SSIERRA@ELUNIVERSAL.COM.MX
Flauta en mano, Elena Durán ha sabido llevar la música mexicana a los auditorios menos convencionales: un basurero, una cárcel, un viejo teatro, una escuela, una casa para ancianos. No conoce fronteras, de ahí el nombre de su programa “Flauta sin fronteras”, que le ha permito llegar a públicos que no pueden normalmente asistir a conciertos. Este mes —las fechas definitivas se conocerán una vez que se normalice la actividad escolar— la flautista dará una serie conciertos en las escuelas de primaria y secundaria del Centro Histórico, como parte del programa “Arte en la Escuela”, que realiza ConArte, Consorcio Internacional Arte y Escuela A.C. “Hace como tres o cuatro años que empecé a hacer Flauta sin fronteras, para mí es importante llegar a donde me necesitan, por ejemplo cada año voy a las fronteras de México y California o México y Texas. Hay que promover la música mexicana”. Nacida en Oakland, California, Durán es hija de padres mexicano-americanos y fue autodidacta hasta los 18 años. Tras hacer sus estudios, fue nombrada profesora de flauta en la Universidad de Stanford. Con arreglos de Luis Zepeda, Durán ofrece conciertos que combinan los temas del proyecto México de mi corazón y piezas de diversos compositores. Interpreta 19 versiones contemporáneas —algunas con arreglos de blues— de canciones como La bamba, Amorcito corazón, México lindo, Bésame mucho, el Son de la Negra o Las mañanitas. “Para mí es muy importante tener a los niños en concierto y mostrarles la música en vivo, sé que nos gusta el i pod o internet, pero la música en vivo es mejor para lograr este objetivo de enseñarle a los niños querer sus raíces, a sentir orgullo por su país. Creo que hay que reforzar con ellos la idea de que la música mexicana es global y también escuchar lo que ellos piensan, saber de sus vidas”. Para fomentar la revaloración de la música popular mexicana en el aula y apoyar la formación musical de los maestros, ConArte creó el libro “Ah que la Canción!”, un método que busca que los niños y niñas recuperen su memoria musical y se promueva el conocimiento y valoración de la música de autores y compositores nacionales; este ejemplo, destaca Durán, es una iniciativa que muestra a los jóvenes cómo está viva la música mexicana. Además de los conciertos con los niños en sus escuelas, en junio Elena Durán ofrecerá seis recitales en el Teatro Sergio Magaña y se grabará en vivo un disco de estas versiones de música mexicana. |
08-Mayo-2009
EXCELSIOR
Durán llevará su música a primarias
Sonia Ávila
ara la flautista Elena Durán la música mexicana tiene fuerza positiva que al escuchar envuelve al espectador en “una magia sorprendente”, en particular a los niños, quienes encuentran en las melodías una conexión con el mundo exterior.
Es por ello que Durán participará con el Consorcio Internacional Arte y Escuela, AC (ConArte), en el programa Arte en la Escuela, para ofrecer dos conciertos a niños de primaria con el objetivo de acercarlos a la música.
Aunque las presentaciones programadas para hoy y el 12 de mayo fueron suspendidas por la emergencia de salud, la flautista asegura que planea actividades extracurriculares, que beneficia el desarrollo de los niños, “quienes posiblemente sí disfrutan del arte, pero no lo conocen”.
Bésame Mucho, Amorcito corazón, La bamba, México lindo y querido son las canciones favoritas de Durán que los estudiantes podrán disfrutar con arreglos de jazz, música clásica y popular.
“Van con arreglos de Luis Zepeda, un músico mexicano sorprendente que logra hacer una mezcla de jazz, popular y clásica para tocar en mi flauta mis canciones favoritas y los niños son los primeros en quedar maravillados al escuchar los acordes”, dice.
Además, charlará sobre su carrera, de lo que hay detrás de un flautista o qué mundo descubrirán los niños si eligen la música como profesión; anécdotas que Durán cuenta para “enamorar” a los menores de este arte.
“La música es muy importante para el desarrollo infantil. Creo que aprenden a enforcar su alma sin saber cómo, simplemente lo hacen sin palabras. Además les da tranquilidad, seguridad en sí mismos cuando logran tocar un instrumento. En otros conciertos he hablado con los niños y veo la conexión que encuentran con la música”, comenta.
Su secreto para atrapar la atención de los infantes, revela, es preparar el concierto como si fuera para adultos: “Las mismas canciones, la misma calidad, el mismo lenguaje musical y verbal, los mismos ritmos. Así, al ver que el espectáculo es de calidad se interesan”.
Por experiencia propia, asegura que la edad no influye en el aprendizaje de un instrumento. Durán dedicó su infancia al estudio autodidacta de la música y a los 20 años fue profesora de flauta en la Universidad de Stanford, Estados Unidos. Luego, con Jean Pierre Rampal, Aurèle Nicolet y James Galway perfeccionó su estilo y hoy es una concertista reconocida.
“Para mí es importante tocar música mexicana y que se conozca. Todos los días cruzo la frontera de Estados Unidos con México para ofrecer conciertos en hospitales, teatros del IMSS o cárceles de diferentes estados, y con los niños es mayor el disfrute”, asegura.
El programa de ConArte, que el año pasado ofreció 23 conciertos en escuelas del Centro Histórico, pretende disminuir la deserción escolar, solucionar los problemas de aprendizaje en materias básicas y mejorar el ambiente agresivo entre los niños.
ara la flautista Elena Durán la música mexicana tiene fuerza positiva que al escuchar envuelve al espectador en “una magia sorprendente”, en particular a los niños, quienes encuentran en las melodías una conexión con el mundo exterior.
Es por ello que Durán participará con el Consorcio Internacional Arte y Escuela, AC (ConArte), en el programa Arte en la Escuela, para ofrecer dos conciertos a niños de primaria con el objetivo de acercarlos a la música.
Aunque las presentaciones programadas para hoy y el 12 de mayo fueron suspendidas por la emergencia de salud, la flautista asegura que planea actividades extracurriculares, que beneficia el desarrollo de los niños, “quienes posiblemente sí disfrutan del arte, pero no lo conocen”.
Bésame Mucho, Amorcito corazón, La bamba, México lindo y querido son las canciones favoritas de Durán que los estudiantes podrán disfrutar con arreglos de jazz, música clásica y popular.
“Van con arreglos de Luis Zepeda, un músico mexicano sorprendente que logra hacer una mezcla de jazz, popular y clásica para tocar en mi flauta mis canciones favoritas y los niños son los primeros en quedar maravillados al escuchar los acordes”, dice.
Además, charlará sobre su carrera, de lo que hay detrás de un flautista o qué mundo descubrirán los niños si eligen la música como profesión; anécdotas que Durán cuenta para “enamorar” a los menores de este arte.
“La música es muy importante para el desarrollo infantil. Creo que aprenden a enforcar su alma sin saber cómo, simplemente lo hacen sin palabras. Además les da tranquilidad, seguridad en sí mismos cuando logran tocar un instrumento. En otros conciertos he hablado con los niños y veo la conexión que encuentran con la música”, comenta.
Su secreto para atrapar la atención de los infantes, revela, es preparar el concierto como si fuera para adultos: “Las mismas canciones, la misma calidad, el mismo lenguaje musical y verbal, los mismos ritmos. Así, al ver que el espectáculo es de calidad se interesan”.
Por experiencia propia, asegura que la edad no influye en el aprendizaje de un instrumento. Durán dedicó su infancia al estudio autodidacta de la música y a los 20 años fue profesora de flauta en la Universidad de Stanford, Estados Unidos. Luego, con Jean Pierre Rampal, Aurèle Nicolet y James Galway perfeccionó su estilo y hoy es una concertista reconocida.
“Para mí es importante tocar música mexicana y que se conozca. Todos los días cruzo la frontera de Estados Unidos con México para ofrecer conciertos en hospitales, teatros del IMSS o cárceles de diferentes estados, y con los niños es mayor el disfrute”, asegura.
El programa de ConArte, que el año pasado ofreció 23 conciertos en escuelas del Centro Histórico, pretende disminuir la deserción escolar, solucionar los problemas de aprendizaje en materias básicas y mejorar el ambiente agresivo entre los niños.
